Alipay, dirigida por Ant Financial, la filial financiera de Alibaba, y WeChat Pay, propiedad de Tencent, constituyen los dos operadores dominantes de medios de pago en China, extendiéndose su dominio al resto de los países asiáticos. Singapur, Malasia y Tailandia figuran entre los destinos más populares para los turistas chinos y, por ende, forman parte de la Ruta de la Seda Digital que está promoviendo que estos países adopten los medios de pago digitales más habituales en China. Hasta tres de cada cuatro establecimientos en estos países utilizan Alipay o WeChat Pay en sus compras, según una encuesta de Nielsen.
Esta tendencia también se ha extendido a Europa, donde los pagos por móvil de los turistas chinos alcanzan hasta el 60% de las compras realizadas en países como Francia, Reino Unido, Italia y Alemania. De hecho, la adaptación de estos países al ecosistema de pagos móviles de China se ha convertido en un atractivo adicional para el turista chino a la hora de elegir un país como destino turístico. Adicionalmente, esta adaptación supone además un aumento en las ventas, que podrían incluso incrementarse dado que hasta un 93% de los turistas chinos gastaría más dinero si se aceptara Alipay como medio de pago, según se desprende de esta encuesta. Actualmente, los turistas chinos utilizan el teléfono móvil en el 69% de los pagos que realizan en sus viajes al extranjero, lo que significa que esta adaptación permite alcanzar con mayor facilidad a los 180 millones de turistas chinos que viajaron al extranjero durante 2019, enriqueciendo la experiencia del viaje mientras se disfruta de la cultura y el estilo de vida locales.
En origen, la revolución tecnológica en China está transformando el mercado de consumo hacia un entorno de medios de pagos digitales. Este proceso se ha beneficiado de un uso no muy extendido de las tarjetas de crédito en China y de una alta penetración del smartphone que ha promovido que toda la sociedad, con independencia de la edad, haya adoptado el escaneado de código QR como una acción habitual en el momento de realizar el pago. Mientras tanto, en destino, la adaptación al ecosistema digital de China ha supuesto que muchos países incorporen servicios de pago por móvil que no están disponibles para los consumidores locales, haciendo extensiva la innovación que se desarrolla en China a los mercados de consumo internacionales.
La colaboración de Alipay con seis empresas de servicios de pago móvil europeos ha posibilitado que los 900 millones de usuarios de la aplicación puedan seguir utilizándola en sus desplazamientos al extranjero gracias a la implementación de un único código QR. Las empresas que colaboran en esta iniciativa son Bluecode (Austria), ePassi y Pivo (Finlandia), Momo Pocket (España), Pagaqui (Portugal), y Vipps (Noruega). Con ello, Alibaba ha conseguido implementar en Europa la innovación más popular de China en entornos FinTech, extendiendo su negocio más allá de la “muralla china” digital con el objetivo no sólo de mejorar la experiencia de viaje de los turistas chinos, sino con la pretensión de incorporarse al mercado de los servicios financieros y de comercio online en los países donde opera Alipay. En este sentido, el objetivo de la filial de Alibaba es incorporar su plataforma de medios de pago en unas 10 millones de pymes en toda Europa en los próximos cinco años. Con ello, se daría servicio a los más de 2.000 millones de consumidores que se estima viajen a Europa, y que pasarían a formar parte de los 1.200 millones de usuarios que tiene Alipay en Corea del Sur, Tailandia, Malasia, Filipinas, Indonesia, India, Bangladesh y Pakistán a través de los acuerdos de colaboración que mantiene con las empresas que ofrecen servicios de monedero digital en esos países.
En el caso de España, el objetivo es incorporar las empresas españolas a la plataforma de pagos de Alipay teniendo como reclamo a los turistas chinos, promoviendo, asimismo, un impulso en el proceso de digitalización. En poco más de un año, la filial de Alibaba ha conseguido incorporar más de 1.000 puntos de venta, consiguiendo que estas empresas se publiciten a través de su plataforma, lo que ha motivado que España sea el país europeo que ha experimentado un mayor volumen de transacciones. Una iniciativa que promueve la adaptación de nuestros comerciantes al turista chino, y que el tiempo dirá si se convierte en el servicio de pago por móvil más extendido entre todos los consumidores europeos, locales y turistas.