Si las grandes oportunidades económicas se producen en tiempos de crisis, Alibaba ha hecho, y está haciendo, muy bien su trabajo. La tregua sin fin en torno a la guerra comercial entre Estados Unidos y China mantiene las perspectivas de crecimiento de la economía del gigante asiático por debajo de los niveles de años anteriores, lastrando a todo el tejido empresarial chino. Una situación de inestabilidad internacional que, sin embargo, no ha afectado a que Alibaba reporte un crecimiento de ingresos del 40% hasta los 16.651 millones de euros en el tercer trimestre de 2019, y 693 millones de usuarios activos en su marketplace. El debut en la bolsa de Hong Kong ha completado uno de los acontecimientos más relevantes en el universo Alibaba, con el que ha conseguido recaudar 11.700 millones de euros, 40 veces más acciones de lo inicialmente esperado.
Unas cifras que consolidan una trayectoria de éxito para Alibaba Group Holding Limited (阿里巴巴集团) (BABA), el consorcio que agrupa a un nutrido número de empresas que operan en Internet y que han situado a la compañía como el referente global del comercio electrónico y, por extensión, a China como el mayor mercado mundial del e-commerce y de los medios de pago. De hecho, si comparáramos el volumen total de ventas de Alibaba, que alcanzó los 768.000 millones de dólares en 2018, con el PIB de una economía, la compañía se situaría en el Top 20 de las grandes potencias mundiales con un valor muy similar al de Turquía en puesto 17, según datos del Banco Mundial de 2018, y con la previsión de su fundador de convertir a Alibaba en la quinta mayor economía mundial en 2036.
Jack Ma, fundador de Alibaba en 1999, es uno de esos líderes visionarios que ha situado la innovación en comercio electrónico como seña de identidad de las capacidades de China en el ámbito de la tecnología global. La diversificación de los negocios de Alibaba, que abarcan desde los pagos electrónicos, la logística hasta las finanzas, ha aupado a la compañía al primer puesto como tecnológica más disruptiva, desplazando del liderazgo a los titanes tecnológicos americanos denominados FANG (Facebook, Amazon, Netflix y Google), siendo la primera vez que una empresa china tiene este reconocimiento, según el informe de innovación tecnológica 2018 de KPMG. Esta innovación tecnológica disruptiva le ha reportado a Alibaba ser reconocida por primera vez como la marca más valorada en China en la clasificación 2019 BrandZ™ Top 100 Most Valuable Chinese Brands.
Los medios de pago se han convertido en la mejor estrategia para que Alibaba conquiste los mercados de Asia-Pacífico, aquellos que reciben un mayor número de turistas extranjeros, principalmente por cercanía. En estos destinos es donde Alipay, la plataforma de servicios de pagos online de Alibaba, busca que los turistas chinos disfruten de la misma experiencia de compra que cuando están en su país, exportando a través de la aplicación del móvil el mismo ecosistema de pagos que tienen mientras residen en China. El número de establecimientos que aceptan pagos a través de Alipay está creciendo exponencialmente por todo Asia-Pacífico. En el caso de Japón, unos de los destinos más atractivos para los turistas chinos, los establecimientos conectados con la plataforma propiedad de Ant Financial han pasado de 50.000 en 2018 a 300.000 en 2019, lo que supone multiplicar por seis la presencia de la plataforma en el mercado nipón.
Una tendencia similar se produce en otros puntos de la región donde Alibaba ha sido muy activa en la creación de acuerdos comerciales con otros socios de pagos electrónicos. Como una segunda fase del despliegue de la nueva Ruta de la Seda, Alibaba está ampliando su conexión digital realizando acuerdos de pagos electrónicos con los países de la ruta, como TrueMoney en Tailandia, GCash en Filipinas, Kakaopay en Corea del Sur, Paytm en India, Dana en Indonesia y Touch ‘n Go (TnG) en Malasia. Se trata de expandir nuevos negocios como parte de la Ruta de la Seda Digital y, a su vez, estos países consiguen incrementar su atractivo para el turista chino, un mercado que alcanzó casi los 150 millones de turistas en 2018. En esta línea se encuadra la nueva iniciativa de Alipay denominada “Taxi en el extranjero” (境外打车), un mini programa que a través del móvil permite realizar la búsqueda, reserva y pago en varias plataformas locales de taxi en 33 ciudades de 10 países, principalmente en los destinos más visitados por el turista chino como es Reino Unido, Estados Unidos, Tailandia y Filipinas. El objetivo es alcanzar más de 100 ciudades en 20 países, lo que supondría para el universo Alibaba extender su influencia a nivel mundial y, con ello, la geopolítica de la tecnología. (Foto: Alibaba Group, Flickr)